El primer asesino en serie del cine es considerado por muchos como el personaje de «Jack the Ripper» en el filme «El Grito de la Muerte» de 1913. Aunque el personaje no es nombrado como «Jack the Ripper» (Jack el destripador) en la película, su historia se basa en los famosos asesinatos que tuvieron lugar en Whitechapel, Londres en 1888.
El personaje de Jack the Ripper en «El Grito de la Muerte» es interpretado por el actor francés Max d’Ollone. La película narra la historia de un misterioso asesino que se dedica a matar a mujeres en las calles de Londres. A medida que las investigaciones avanzan, se descubre que el asesino es un hombre conocido como «Jack the Ripper», que se ha convertido en una figura legendaria debido a sus horribles crímenes.
«El Grito de la Muerte» es considerada como una de las primeras películas de terror y es considerada como una de las primeras representaciones de un asesino en serie en el cine. La película fue muy popular en su época y tuvo un gran impacto en el género del cine de terror, sentando las bases para las películas de asesinos en serie que vendrían después.
En la década de 1920 y 30, surgieron varias películas que se centraron en asesinos en serie, incluyendo «Nosferatu» de 1922 y «M» de 1931. Estas películas ayudaron a establecer algunos de los temas y elementos que se han convertido en característicos de las películas de asesinos en serie, como el uso de la violencia y el misterio para crear tensión y miedo en el espectador.
Con el tiempo, el género de asesinos en serie ha evolucionado y se ha convertido en uno de los géneros más populares en el cine. Desde «El Grito de la Muerte» hasta las últimas películas de terror, los asesinos en serie han sido un elemento recurrente en el cine, y han sido retratados de muchas maneras diferentes, desde figuras amenazantes y aterradoras hasta personajes complejos y complejamente desarrollados.