Hay momentos en los que nos sentimos mareados, como si no pudiéramos mantenernos erguidos o nos desmayáramos; No importa de qué manera lo mires, los mareos son una queja común. Esta enfermedad, aunque parezca mentira, envía cada año a miles de personas al médico.
El mareo no es más que la sensación de estar moviéndose, o que las cosas se mueven a nuestro alrededor. Algunos sienten que dan vueltas, se inclinan, se balancean o se caen, otros tienen vómitos o zumbidos en los oídos. Asimismo, los ojos pueden moverse sin control de un lado a otro.
El mayor temor es que este sea el anuncio de un tumor cerebral. Esto sucede en menos del 1% de los casos. La mayoría de los mareos son desagradables, pero inofensivos y desaparecen rápidamente.
Cualquier persona con episodios graves, persistentes o recurrentes debe consultar a un médico como precaución, incluido un neurólogo o un otorrinolaringólogo.
El alcohol, las drogas, la tos prolongada o factores psicológicos pueden dilatar los vasos sanguíneos. Como resultado, la sangre puede acumularse en las piernas, lo que ralentiza el proceso hacia el cerebro.
El vértigo es más severo después de los 40 años. Las posibles causas subyacentes incluyen medicamentos para la presión arterial alta, diabetes, anemia, hemorragia gastrointestinal o enfermedades del corazón y los vasos sanguíneos. Algunas de estas situaciones requieren atención urgente.