¿Alguna vez te has preguntado cómo es posible que veamos imágenes tan nítidas en nuestros dispositivos electrónicos? La respuesta se encuentra en los pequeños puntos conocidos como pixeles. Estos puntos son los que componen las imágenes digitales y, cuanto más pequeños y numerosos sean, mejor será la calidad de la imagen.
Un pixel es la unidad básica de una imagen digital. La palabra «pixel» es una abreviatura de «picture element», que significa «elemento de imagen» en español. Un pixel es simplemente un punto de color en una imagen digital.
El concepto de pixel se inventó en la década de 1960, cuando los científicos de la computación comenzaron a trabajar en formas de almacenar imágenes digitalmente. En 1963, el científico de la computación Russell Kirsch desarrolló el primer dispositivo capaz de escanear imágenes y almacenarlas como una serie de puntos de color. Este dispositivo, conocido como el «escáner de imagen de Kirsch», fue el primer dispositivo que utilizó el concepto de pixel para almacenar imágenes.
A medida que la tecnología avanzó, los pixeles se volvieron cada vez más pequeños y precisos, permitiendo la creación de imágenes digitales cada vez más detalladas y realistas. En la actualidad, los pixeles se utilizan en una variedad de dispositivos, desde cámaras digitales y teléfonos inteligentes hasta televisores y pantallas de ordenador.
Generalmente se habla de megapixeles en lugar de pixeles porque los megapixeles indican la resolución de una imagen digital. La resolución se refiere a la cantidad de pixeles que componen una imagen, y se mide en megapixeles (millones de pixeles).
Cuanto mayor sea la resolución de una imagen, más detallada será. Por ejemplo, una imagen con una resolución de 5 megapixeles tendrá más detalles que una imagen con una resolución de 2 megapixeles. Por eso, cuando se habla de cámaras digitales o dispositivos que utilizan imágenes digitales, se suele hablar de megapixeles en lugar de pixeles, puesto que es más fácil entender que una cámara tiene «12 megapixeles» en lugar de «12 millones de pixeles».
En definitiva, cuanto mayor sea la resolución más pixeles tendrá la imagen y, por lo tanto, mejor será su calidad. Pero, ¿qué pasa con nuestros ojos? ¿Nuestra capacidad de ver también está limitada por la resolución? ¿Existe alguna relación entre la resolución de una cámara y la de nuestros ojos? Descubre la respuesta a estas preguntas y en nuestro artículo sobre la resolución del ojo humano.