El rodio es un elemento químico que pertenece al grupo del platino en la tabla periódica. Es un metal raro, de color plateado, muy resistente a la corrosión y altamente reflectante. Su alto costo lo convierte en el metal más caro del mundo, con un precio actual de más de 22.000 dólares por onza.
El rodio se encuentra en la naturaleza en minerales de platino, que son extremadamente raros y solo se encuentran en algunas partes del mundo, como Rusia, Sudáfrica y Canadá. La extracción de rodio es muy difícil debido a que se encuentra en cantidades muy pequeñas en la roca y se necesita un proceso de refinación muy complejo para obtener el metal puro.
El rodio se utiliza principalmente en la industria automotriz para la fabricación de convertidores catalíticos, que son componentes esenciales en los sistemas de escape de los vehículos que reducen la emisión de gases tóxicos al medio ambiente. El uso de convertidores catalíticos se ha vuelto obligatorio en muchos países para reducir la contaminación del aire y proteger la salud pública. En la actualidad, más del 80% de la producción de rodio se utiliza en la industria automotriz.
Además de su uso en la industria automotriz, el rodio también se utiliza en la fabricación de equipos electrónicos, joyería, relojes y en la industria química. El rodio también se utiliza como catalizador en diversas reacciones químicas debido a su alta capacidad de oxidación y reducción.
El rodio es un metal muy resistente a la corrosión y a la oxidación, lo que lo hace muy valioso en aplicaciones industriales que requieren materiales resistentes a la corrosión. También es muy resistente a la temperatura y se utiliza en la fabricación de termopares y otros dispositivos de medición de temperatura.
En términos de su estructura atómica, el rodio tiene un número atómico de 45 y una masa atómica de 102,91. Se encuentra en el grupo del platino en la tabla periódica, junto con otros metales preciosos como el platino y el paladio. Como los demás metales del grupo del platino, el rodio es muy estable y no reacciona fácilmente con otros elementos químicos
Si bien el rodio es el metal más caro del mundo, éste no es más duro que el diamante, conocido por ser el material más duro del mundo. La dureza se refiere a la capacidad de un material para resistir la deformación plástica o la penetración por parte de otro material. La escala de dureza de Mohs se utiliza para medir la dureza de los materiales, donde el diamante tiene una puntuación de 10, mientras que el rodio tiene una puntuación de 6 en la escala de Mohs.
Es importante tener en cuenta que la dureza no es lo mismo que la resistencia o la durabilidad. Aunque el diamante es el material más duro, es frágil y puede astillarse o romperse si se somete a fuerzas intensas o golpes. El rodio, por otro lado, es más resistente a la deformación y a la fractura que el diamante.