El radar (acrónimo en inglés de «Radio Detection and Ranging») es un sistema de detección que utiliza ondas de radio para determinar la posición, velocidad y distancia de objetos. Fue inventado en los años 30 del siglo XX, y desde entonces ha tenido un impacto significativo en una variedad de campos, incluyendo la aviación, la navegación marítima, la defensa y la meteorología.
El primer sistema de radar funcional fue desarrollado en 1935 por el físico Robert Watson-Watt, quien estaba trabajando para el gobierno británico en el Departamento de Investigación Meteorológica. Watson-Watt y su equipo demostraron que las ondas de radio podían ser utilizadas para detectar objetos a distancias significativas, lo que permitiría a los aviones detectar y evitar los rayos. Este primer sistema de radar se llamó «Chain Home» (Cadena de Hogar) y fue utilizado por los británicos durante la Segunda Guerra Mundial para detectar los ataques aéreos enemigos.
Desde entonces, el radar ha sido mejorado y desarrollado para una variedad de aplicaciones.
Básicamente el sistema de radar consta de un transmisor, un receptor y un display o pantalla. El transmisor emite ondas de radio de alta frecuencia hacia el objeto que se desea detectar. Estas ondas viajan a través del aire y se reflejan en el objeto, regresando al receptor. El receptor entonces recibe las ondas reflejadas y las convierte en una señal eléctrica. Esta señal se procesa para determinar la distancia, la velocidad y la posición del objeto detectado. La información recolectada se muestra en un display o pantalla para que el operador pueda ver la posición y el movimiento del objeto detectado.
Los radares también pueden utilizar diferentes técnicas para mejorar su precisión y capacidad de detección, como la polarización y la modulación.
Los radares modernos incluyen sistemas de radar de aire-aire utilizados en aviones de combate, radares de navegación utilizados en barcos y submarinos, y radares meteorológicos utilizados para medir la velocidad y dirección del viento, la precipitación y la posición de las nubes.
El radar también ha tenido un impacto significativo en la vida cotidiana. Los radares de tráfico se utilizan en sistemas de navegación automotriz, los radares de velocidad se utilizan para medir la velocidad de los automóviles, y los radares de control de tráfico aéreo se utilizan para guiar los aviones en el aire.