El Consejo Europeo es una institución fundamental de la Unión Europea, responsable de establecer las orientaciones generales de la política de la UE y de tomar decisiones importantes sobre la dirección futura de la integración europea. Sin embargo, este importante organismo no siempre ha existido. El primer Consejo Europeo se celebró en diciembre de 1974 en la ciudad belga de Bruselas, y su creación marcó un hito histórico en la construcción europea.
En ese momento, la Comunidad Económica Europea (CEE) estaba compuesta por seis países miembros: Francia, Alemania, Italia, Bélgica, Países Bajos y Luxemburgo. La CEE había sido creada en 1957 con el objetivo de promover la cooperación económica entre estos países, pero a medida que el tiempo pasaba, se hizo evidente la necesidad de una mayor cooperación política. Esa fue la razón por la que se convocó el primer Consejo Europeo en Bruselas.
En este primer Consejo Europeo, los líderes de los países miembros se reunieron para discutir y tomar decisiones políticas a nivel europeo. En ese momento, se acordó que el Consejo Europeo se reuniría regularmente para tratar temas de importancia estratégica para la CEE, y se estableció una presidencia semestral rotativa entre los países miembros.
Con el paso del tiempo, el Consejo Europeo se convirtió en una institución cada vez más importante en la toma de decisiones de la UE. Con el Tratado de Maastricht de 1992, se convirtió en una institución formal de la UE y adquirió un papel más central en la toma de decisiones políticas. Desde entonces, se ha reunido regularmente en sesiones de alto nivel, con la participación de los líderes de los países miembros y de la Comisión Europea.