Un estado de alarma es una medida excepcional de emergencia declarada por el gobierno de un país con el fin de garantizar la protección de la población y el mantenimiento del orden público en situaciones de crisis o calamidad.
El estado de alarma permite a las autoridades restringir la movilidad de la población y tomar medidas de protección adicionales, como la prohibición de reuniones públicas y la imposición de toques de queda. También permite a las autoridades imponer medidas más estrictas en términos de control de fronteras y seguridad pública.
Un estado de alarma suele ser declarado en situaciones de emergencia, como desastres naturales, conflictos armados o pandemias, cuando los medios ordinarios de control y protección no son suficientes para garantizar la seguridad.
En España, el estado de alarma más reciente fue declarado en octubre de 2021 debido a la pandemia de COVID-19. Durante este periodo, se impusieron restricciones en la movilidad de la población, incluyendo un toque de queda nocturno, y se cerraron algunos negocios y servicios públicos. Estas medidas fueron implementadas para frenar la propagación del virus y proteger la salud de la población.
Sin embargo, el estado de alarma también ha sido criticado por algunos por ser una restricción a la libertad individual y por causar un impacto económico negativo. Además, muchos argumentan que el estado de alarma debería ser una medida de último recurso y que las autoridades deberían buscar soluciones alternativas antes de recurrir a él.